El Aula Abierta

   El Aula Abierta actúa como espina dorsal de la Escuela Libre de Enseñanza. En ella se realizan varias de las iniciativas promovidas por la ELE y durante gran parte del tiempo actúa como espacio libre de juegos a partir de los cuales se derivan las diferentes materias.

   La necesidad del espacio

   En Los Solares las niñas juegan, se relacionan y satisfacen sus inquietudes naturales en espacios abiertos. Se suben a los árboles, pescan, vuelan cometas hechas con bolsas de basura y reciclan lo que encuentran para convertirlo aquello que necesiten: una lata de conservas es un coche, un palo largo es un caballo en el que te puedes montar y un neumático viejo es un aro que va corriendo contigo mientras lo azuzas con la mano.

   Si bien normalmente su divertimento es muy sano, es cierto que puede causar molestias al vecindario cuando se meten por los patios de las casas o “toman cosas prestadas” para poder jugar pero, sobre todo, es muy necesario en este entorno tener acceso a otro tipo de juegos que amplíe su marco de posibilidades, tanto a nivel de relaciones personales en el plano común, como de desarrollo de sus propias capacidades personales en lo individual. Hablamos, por ejemplo, de puzles, juegos de mesa que estimulen sus capacidades, pinturas o cuentos. Es imprescindible un espacio en el que las niñas puedan desarrollar libremente sus inquietudes mediante el juego y, por supuesto, relacionarse, en un entorno seguro.

  

El juego como método

   En cualquier proceso de aprendizaje encontraremos invariantes tales como la perseverancia, la concentración, la búsqueda de un método, el error, la tolerancia a la frustración, la autodisciplina, la voluntad de mejorar, etc. Y todas ellas están presentes en casi cualquier juego. Podríamos decir sin temor a equivocarnos que el aprendizaje de cualquier cosa es, en realidad, un juego. Aprender a conocernos a nosotros mismos a través del juego es la llave del conocimiento y, por esa razón, en la ELE consideramos de primera importancia el espacio de la ludoteca como un lugar en el que despertar inquietudes y comenzar a desarrollar una serie de capacidades, sin las cuales no es posible llevar a cabo proceso de aprendizaje alguno.

   Incidimos, además, en el juego libre no dirigido como método de exploración de la autonomía personal. Con la “no dirección” del juego nos referimos a que el papel de las acompañantes adultas, durante el mismo, no es el de tratar que las niñas consigan unos resultados determinados, sino trabajar con ellas la actitud positiva ante el error o tolerancia a la frustración. Hacia dónde dirijan sus esfuerzos, será su decisión.

  

Funcionamiento

   La ELE pone a su disposición el aula abierta con el fin de que pueda ser utilizado a modo de espacio de juego libre cuando no se estén llevando a cabo otras actividades. Es un espacio abierto en el que los juegos quedan a disposición de quien quiera utilizarlos bajo la supervisión de una o varias acompañantes adultas, que únicamente velarán por el cumplimiento de unas normas básicas de convivencia y cuidado, tanto personal como material. Dado que una de nuestras aspiraciones es involucrar a la comunidad en la cuestión educativa, la organización de este espacio corre a cargo de las propias vecinas. No obstante, también es necesario subrayar la necesidad de implicarnos económicamente con las involucradas. Las acuciantes necesidades económicas de la comunidad nos obligan a tratar de cubrirlas a cambio de su colaboración en la medida de nuestras posibilidades.